El diputado Miguel Garaulet Rodríguez registra en el Congreso una pregunta sobre ese tramo y la portavoz regional, Victoria Domínguez, pregunta a la Junta por qué no se gastó el dinero de 2016 para mejoras y seguridad vial
Mérida, 7 de febrero de 2017. El Grupo Parlamentario Ciudadanos en el Congreso ha registrado una pregunta al Gobierno, para su respuesta por escrito, solicitando al Ejecutivo que explique si tiene previsto llevar acabo alguna actuación concreta, dirigida a reducir la peligrosidad del tramo de la carretera N-435, situado entre el principio de la zona urbana de Almedral y la variante de Barcarrota. Se trata del trayecto comprendido entre los kilómetros 33,4 y 45,9, que está considerado como el tramo de riesgo más peligroso de la red de carreteras de España, a la vista de la siniestralidad que registra.
En el caso de que el Gobierno tenga ya alguna previsión, el diputado Miguel Garaulet Rodríguez, pide que le sean “detalladas éstas y los plazos que maneja el Gobierno para llevar a cabo las actuaciones dirigidas a reducir la alta peligrosidad de esta carretera”. Según señala el diputado, “en estos 12,5 kilómetros de carretera se han producido cinco accidentes graves entre 2013 y 2015, con un balance de tres personas fallecidas y cuatro heridas de gravedad, siendo considerado por tercer año consecutivo como ‘tramo de riesgo’”. De los cinco accidentes mortales y graves registrados en este punto, uno corresponde a un usuario de motocicleta y otro a un usuario de vehículo pesado. 
Por su parte, la portavoz de Ciudadanos en la Asamblea de Extremadura, Victoria Domínguez, se hizo también eco de la peligrosidad de las carreteras regionales. En este sentido, pidió explicaciones al presidente de la Junta de Extremadura, en el último pleno ordinario, “para que aclarase las medidas a tomar por el gobierno regional para reducir el número de accidentes, dadas las malas cifras de 2016”.
Victoria Domínguez ha criticado el mal estado de las carreteras extremeñas que achaca “a la falta de un adecuado mantenimiento e inversiones como consecuencia de la falta de ejecución del presupuesto”. En este sentido, ha puesto como ejemplo que “de la partida de 2,5 millones para seguridad vial consignada por la Junta para 2016, solo se hubieran invertido -a fecha de 15 de setiembre- 6.900 euros”. “Hemos hablado mucho de este tema, pero la seguridad vial de Extremadura merece que el presupuesto se empiece a ejecutar ya. Hay que darle todo el impulso para que las acciones en seguridad y las obras a realizar en 2017 sean una realidad”, agregó.
La peligrosidad del tramo entre Almendral y Barcarrota queda confirmada por el último informe del EuroRAP, hecho público en diciembre pasado, en el que participa el RACE y que analiza la siniestralidad en las carreteras españolas. En él han sido analizados 24.805 kilómetros y los accidentes de tráfico producidos entre los años 2013 y 2015.